Para festejar su edad de jubilación –en muchos de los casos– un nutrido grupo de bañezanos nacidos en el año 1953 se reunieron ayer para participar en una misa en la iglesia parroquial de El Salvador, tras la cual compartieron una comida con la que celebrar sus 65 cumpleaños. Como la ocasión lo merecía, tras la fotografía de recuerdo a la entrada del templo y las múltiples anécdotas durante la comida, la fiesta se prolongó durante varias horas.
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