Imagen de archivo de un camión descargando remolacha en las instalaciones de la fábrica azucarera de La Bañeza.
Las fábricas azucareras de Miranda de Ebro (Burgos) y Toro (Zamora) están trabajando a pleno rendimiento y la primera ya ha recibido 33.000 toneladas de remolacha de las 50.000 pendientes de entrega y la segunda 23.000 toneladas de las 90.000 pendientes, según informaron fuentes de la empresa Azucarera, propietaria de ambas, que apunta que los trabajos de preparación del terreno y siembra de cara a la próxima temporada avanzan a un “ritmo excelente”.
La compañía explicó en una nota de prensa que el pasado jueves, 25 de abril, se hizo efectiva la reapertura de la fábrica de Toro para procesar la remolacha pendiente de la campaña 12/13 en su zona de abastecimiento y en el entorno de La Bañeza. Desde entonces y hasta hoy, lunes, ha recibido 23.000 toneladas de remolacha de 18,30 por ciento de riqueza.
Estas entregas de remolacha presentan “un aspecto excelente sin ningún deterioro aparente a pesar del considerable retraso en el arranque y las adversidades climatológicas sufridas”, mientras que el contenido en sacarosa es muy similar al que había cuando paró la fábrica, según destacaron las mismas fuentes. En total, se esperan recibir algo más de 90.000 toneladas, que en su mayoría van a estar ya cosechadas a lo largo de los próximos días.
Por su parte, en la fábrica de Miranda, después de una semana de funcionamiento, se confirma el “buen estado de la remolacha”, con riquezas que superan los 17 grados y buena calidad industrial. Ha recibido ya 33.000 toneladas de las 50.000 que se esperan en total, que ya están prácticamente todas cosechadas.
Optimismo para la nueva campaña
En lo que respecta a las siembras de la nueva campaña, Azucarera informó de que el ritmo de trabajo en el campo, preparando el suelo y sembrando durante toda esta semana, está siendo “excelente”, según una nota de prensa de la compañía, recogida por Ical. Al respecto, la empresa calcula que la superficie final sembrada se puede acercar mucho a la de la pasada campaña porque, a pesar del retraso, se está haciendo “una buena labor de siembra” y además hay muchos agricultores que están optando por sembrar remolacha por la conveniencia de diversificar cultivos, por su rentabilidad y, sobre todo, teniendo en cuenta la caída del precio del maíz de la próxima cosecha que están señalando los principales indicadores de los mercados agrícolas.
