La Bañeza acogió este jueves una jornada de trabajo con la participación de representantes políticos, de la industria azucarera y de los sindicatos agrarios para defender el impacto económico del sector remolachero en la provincia leonesa, analizando la situación que vive actualmente y planteando una serie de retos de futuro encaminados a evitar la destrucción de más tejido empresarial. Organizada por la Federación de Industria, Construcción y Agro (FICA) de UGT, esta ‘cumbre’ quiso reunir a todos los agentes implicados en el sector del cultivo y la industria remolachera para poner de manifiesto la importancia que en la comarca bañezana tiene la fábrica azucarera.
“La remolacha y el azúcar: impacto económico y social en Castilla y León” es el título del encuentro con el que el sindicato ha querido dar continuidad a la jornada celebrada el pasado año en la capital leonesa y que llega a La Bañeza por empeño del bañezano Francisco Fernández, secretario general de la Sección sindical estatal de Azucarera, y firme defensor de La Bañeza como “la casa del azúcar y el centro de referencia para el sector remolachero, con más de cien años de historia y un futuro lleno de oportunidades por delante”.
Fernández apuntó que León podría sumar entre 9.000 y 10.000 hectáreas de remolacha cultivada por casi un millar de agricultores, lo cual genera empleos agrícolas a los que hay que sumar los 150 puestos de trabajo fijos en la azucarera de La Bañeza durante todo el año, que ascienden a 330 directos en plena campaña, a los que encima hay que sumar un número mucho más elevado de empleos indirectos e inducidos.
El presidente del Comité de Empresa en Azucarera abogó por “ser ambiciosos, remando todos en la misma dirección” porque hay aún mayor capacidad de crecimiento en la factoría de La Bañeza. “Tenemos una industria que invierte entre 10 y 15 millones anuales, que está en disposición de poner en el mercado entre 600.000 o 700.000 toneladas de azúcar, de las que 150.000 o 170.000 toneladas podrían salir desde León”, remarcó.
“Un futuro prometedor”
Por su parte, la consejera de Agricultura y Ganadería de la Junta de Castilla y León, Milagros Marcos, reiteró el compromiso de la administración autonómica con el sector primario, al que calificó de “esencial”, cifrando en un 84% el porcentaje de remolacha que se siembra en la Comunidad respecto al total nacional. Además, insistió en que tanto el sector remolachero como la industria “están perfectamente preparados para el fina de las cuotas, teniendo en cuenta que se ha pasado de producir 70 toneladas por hectárea a 110 en los últimos años, lo que hace pensar en un futuro prometedor en el que hay que estar unidas todas las partes”, dijo.
Marcos reclamó un precio “razonable” para los productores y reiteró que “el fin de las cuotas debe ser una oportunidad de negocio” tanto para el sector agrario como para la industria y los consumidores. Para ello remarcó que “la imposibilidad de fijar precios de venta debe ser un aspecto a tener en cuenta a la hora de reducir costes mediante políticas adecuadas y los proyectos de investigación e innovación necesarios”, entre los que se encuentran la modernización de los regadíos o la reducción de la factura energética, todo para “ser competitivos en un mercado global cada vez mayor”.
La consejera Milagros Marcos clausuró la jornada.
De ilusiones también se vive.
Más de lo mismo. Nada de nada.
Invertir…. también son los despidos?
Los rendimientos de este año también serán de 110 t/ha?
Las primeras 80 t/ha son gastos, no nos engañemos, veremos lo que sale esta campaña. Que no nos cuenten milongas.
El tiempo pone a cada cual en su sitio.