Ical
El nuevo obispo de la Diócesis de Astorga, monseñor Juan Antonio Menéndez, ha tendido este sábado la mano a las instituciones para poder colaborar “en la consecución del bien común, el progreso, la justicia y la paz”, y abogó por una colaboración “necesaria y fluida” aunque siempre “desde la independencia y el respeto mutuo en aras del beneficio de los ciudadanos”.
Menéndez, que tomó posesión del cargo, en sustitución de Camilo Lorenzo, dijo sentirse “un astorgano asturiano”, que trabajará para garantizar la cercanía “con todas las zonas de la Diócesis de Astorga” como el Bierzo, la provincia de Orense, a la que se dirigió en gallego, Zamora y otros pueblos cercanos. Con ellos, el nuevo obispo de Astorga se ha marcado una “hoja de ruta” que pasa por “escuchar, comprender, ayudar, orientar y, en definitiva, amar”. Esta ayuda y orientación “en un servicio de amor” es la misión del obispo en su Diócesis, donde apostó por “preparar un pueblo bien dispuesto para que salga de las encrucijadas de los caminos a prodigar la buena nueva de la salvación” y poder acoger “a todos aquellos malheridos en su cuerpo y espíritu”.
Juan Antonio Menéndez dijo llegar a la Diócesis de Astorga para entregar su vida. “Para dedicarme en cuerpo y alma a todos y cada uno de los diocesanos”, incidió, al tiempo que pidió a los fieles que no tengan reparos en acercarse a él, “a cualquier hora y para cualquier problema”, en especial en el caso de los pobres y los afligidos. “Vine a serviros para fortalecer vuestra fe y vuestra esperanza, para amaros de verdad”, incidió.
El todavía obispo electo de Astorga salió minutos antes de las 11.30 horas del Seminario de Astorga, donde fue recibido por muchos vecinos y por el emotivo sonido de las gaitas y las castañuelas, así como por varios pendones que le precedieron en su recorrido por las calles de la capital maragata hacia la catedral. Durante este trayecto, que duró apenas diez minutos, Menéndez estuvo acompañado por el nuncio apostólico en España, monseñor Renzo Fratini; el administrador diocesano de Astorga, Marcos Lobato; el obispo emérito, Camilo Lorenzo, y el arzobispo de Oviedo, Jesús Sanz, entre otros.
A su llegada a la catedral fue recibido por numerosos fieles entre aplausos y en la puerta del templo tomó el protagonismo por unos instantes el sonido de la gaita, que entonó el ‘Asturias, patria querida’ en honor a los orígenes del nuevo obispo de la capital maragata. Posteriormente, accedió al interior del templo, donde visitó la capilla del Santísimo, donde permaneció en adoración en preparación para la eucaristía y finalmente se revistió con los ornamentos sagrados para celebrar la eucaristía.
El administrador diocesano de Astorga fue el encargado de dar la bienvenida al todavía obispo electo, al que reconoció la “alegría sobremanera” cuando conoció la noticia, por su “amistad y afecto”. En relación a la ciudad de Astorga: “Si pudiera leer por las paredes de nuestros corazones, vería que están decorados con una palabra, que es de bienvenida”, añadió Lobato.
Por su parte, Renzo Fratini agradeció la “entrega” del obispo emérito de Astorga Camilo Lorenzo, y anunció la lectura del mandato apostólico por el que el Papa nombró obispo de Astorga a monseñor Juan Antonio Menéndez. Posteriormente, entregó las letras apostólicas, que procedió a leer el secretario canciller, Francisco Javier Gay. El acto concluyó con el canto ‘Demos gracias a Dios’, para entregar el báculo al nuevo obispo.
Acto multitudinario
Al acto asistieron numerosas autoridades civiles y militares, entre ellos el delegado del Gobierno en Asturias, Gabino de Lorenzo; la subdelegada del Gobierno en León, Teresa Mata; el presidente de la Diputación de León, Juan Martínez Majo; la rectora de la Universidad Pontificia de Salamanca (UPSA), Myriam Cortés; los alcaldes de Ponferrada, Gloria Fernández Merayo, y de Astorga, Arsenio García, así como el de La Bañeza, José Miguel Palazuelo, además de autoridades militares de la capital maragata.
Entre la representación episcopal, se encontraron el cardenal arzobispo de Valladolid y presidente de la Conferencia Episcopal Española, Ricardo Blázquez, así como obispos y arzobispos de toda la geografía española, como los de Burgos, Fidel Herráez; Ávila, Jesús García Burillo; Ciudad Rodrigo, Raúl Berzosa; León, Julián López; Salamanca, Carlos López; Zamora, Gregorio Martínez Sacristán; Osma- Soria, Gerardo Melgar; Segovia, César Franco, y el el administrador de la Diócesis de Palencia, Antonio Gómez Cantero.
La venida a nuestra Diócesis del nuevo Prelado Monseñor DON JUAN ANTONIO MENÉNDEZ, es un canto a la ESPERANZA y BIENESTAR de los más vulnerables. Le tomo la palabra y espero visitarle personalmente, ya que ignora muchos problemas que tienen solución, pero hay muchas personas que se tienen por muy religiosas, que no aportan nada en beneficio de los POBRES y han hecho mucho daño a la IGLESIA.
Don Juan Antonio, lo vá tener difícil, dado que aquí hay mucha oveja descarriada y mucho cabrito suelto. Dios le Bendiga.