El obispo de Astorga, monseñor Juan Antonio Menéndez, ha fallecido de forma inesperada a primera hora de la tarde de este miércoles como consecuencia de un infarto. Tenía 62 años de edad y 38 de sacerdocio, y fue nombrado máximo responsable de la Diócesis asturicense el 18 de noviembre de 2015, en sustitución de monseñor Camilo Lorenzo.
Nacido en Villamarín de Salcedo (Asturias) el 6 de enero de 1957, en 1968 ingresó en el Seminario de Oviedo para cursar secundaria y posteriormente los estudios eclesiásticos, siendo licenciado en 1980. Licenciado en Derecho Canónico por la Universidad Pontificia de Salamanca (2005), hasta el 2011 fue vicario general del Arzobispado de Oviedo y hasta el 2013 Vicario episcopal de asuntos jurídicos.
El 26 de abril de 2013 fue nombrado Obispo titular de Nasai y auxiliar de Oviedo por el Papa Francisco. Recibió la ordenación episcopal el 8 de junio por Jesús Sanz Montes. En 2015 fue nombrado Obispo de la Diócesis de Astorga para suceder Lorenzo Iglesias, tomando posesión de su cargo el 19 de diciembre. Desde 2017 es Presidente de la Comisión episcopal de Migraciones de la Conferencia Episcopal Española.
Durante su episcopado tuvo una gran relación con La Bañeza, sus parroquias y cofradías; no en vano, fue pregonero de la Semana Santa de la ciudad en el año 2017 y participó en la fiesta del Santo Potajero o en la de Santa Marina en diversas ocasiones.
A tres días del Domingo del Buen Pastor, a dos de Ntra. Sra. de Fátima y, precisamente en la festividad de San Isidro Labrador, se nos ha ido a la inesperada llamada del SEÑOR, nuestro querido Obispo D.JUAN ANTONIO.
Humanamente no se comprende esto, dado que era joven, muy trabajador y con importantes proyectos y responsabilidades que cumplir.
En los pocos años que le tuvimos, demostró gran cariño por LA BAÑEZA.
La Siembra que realizó en la Diócesis, será recompensada con una enorme cosecha. Desde el Cielo confío que por su intercesión, ayudará y protegerá a toda la Diócesis.
Mi más profundo y sentido pésame a toda su familia, al Arzobispo de
OVIEDO y a todos los Diocesanos de ASTORGA.
PD. UN DESFIBRILADOR, SALVA VIDAS.