Fulgencio Fernández
Si algo caracteriza el trabajo de Gregorio Fernández Castañón al frente de la ‘factoría CamparredOnda’ es la generosidad, el nulo afán crematístico, el mecenazgo… por ello se alegrarán de que el jurado de su premio de Reconocimiento Cultural ‘La Armonía de las Letras’ (que lleva el nombre de su asociación cultural) haya recaído en esta complicada edición del año 2020 en alguien de la ‘misma cuerda’ de solidaridad y entrega a la cultura. Dice el fallo del Jurado: «Por unanimidad se otorga el Premio de Reconocimiento Cultural 2021 a Felipe Pérez Pollán por ‘crear, organizar y difundir durante más de treinta y cinco años Poesía para vencejos. Un acto cultural, participativo y abierto donde la poesía y la música se unen cada año en Palacios de la Valduerna para disfrute del pueblo».
Completa la nota la información de que «el ganador de cada convocatoria recibe una escultura realizada por el escultor leonés Antolín (Antolín Álvarez Chamorro) y un diploma acreditativo con ilustraciones del artista, también leonés, Alejandro Cartujo. El premio se entrega al interesado en un acto público, a realizar normalmente en el mes de abril, «coincidiendo con la presentación de todas nuestras publicaciones anuales: revista CamparredOnda y el libro de alguna de nuestras colecciones: Los libros de CamparredOnda, Los cuadernos de plata y los Libros de CamparredOnda formato XXL, sin olvidarnos, tampoco, de alguno de nuestros complementos (no todos los años): Cd y Los facsímiles de CamparredOnda». El año pasado ya tuvo que retrasarse hasta el verano y en un espacio abierto, el Soto de Boñar, y este 2021… a ver.
Pero Felipe Pérez Pollán ya ha entrado en la historia de este premio, que nació en el año 2008 y del que han sido los anteriores ganadores Emilio Gancedo, Fulgencio Fernández y Mauricio Peña, Manuel Fresno González, “Filandón” del Diario de León, Fundación Cerezales Antonino y Cinia, Promonumenta, Instituto de Estudios Bercianos, José Ignacio García, Román Álvarez Rodríguez, Pueblo de Soto de Sajambre, Miguel Fuertes González y Ágora de la Poesía. A lo largo de su historia, el jurado, además del reconocimiento a una persona o asociación, otorgó también dos accésits (diploma de honor) a: Toño Morala (2018) y a Alfredo García Fernández (2020).
Felipe Pérez Pollán, además de ‘padre’ de Poesía para Vencejos, ha sido profesor de Lengua y Literatura (se jubiló en 1998), también fue presidente del Instituto Comarcal de Estudios Bañezanos y autor del libro de poesía ‘Dónde estarán los vencejos’, con prólogo de Antonio Colinas, quien escribe en el mismo: «La autenticidad de estos poemas radica sobre todo en cómo los desarrolla el autor, cómo fluyen… una especie de ‘música callada’, que es la que salva: la música del mundo en armonía y la que brota, con buen ritmo, de los propios versos que va escribiendo».
Reconoce Pérez Pollán su pasión por el ciclo de Poesía para vencejos, se lo cuenta a Manuel Cuenya en su fragua literaria: «Después de 35 años te diré que Poesía para Vencejos representa todo para mí. He conocido y tratado a tantos poetas que casi no podría elegir», le explica Pérez Pollán, de quien esctibe: «Con ochenta y cuatro años, se mantiene con la energía y firmeza suficientes para continuar deleitándonos con su Poesía para Vencejos». Ahora, animado por un premio.
Fotografía de archivo de una edición de Poesía para Vencejos.
