Había recibido hace unos meses un dvd enviado por mi amigo José Luis Ramos, de Burgos. –Una banda argentina que imita a Queen. -¡No te la pierdas! Siempre me gustó Queen y pensé, en aquel momento, que era una banda difícil de imitar por sus espectaculares puestas en escena y sus voces, en particular la de Freddie Mercury. Visioné el dvd y me quedé perplejo: todos lo hacían muy bien, pero el que imitaba a Freddie no solo se parecía físicamente sino que cantaba igual que él.
Este preámbulo viene a cuento de que ayer cuando acudimos a Astorga a este TRIBUTO A QUEEN yo ya sabía lo que iba a ver, solo me quedaba comprobar que lo que había visto enlatado se correspondía con la realidad en directo.
El domingo no pudo ser porque la lluvia lo impidió pero ayer lunes la noche se calmó y la Plaza Mayor de Astorga se llenó de gente para disfrutar de uno de los mejores conciertos que he visto en los últimos años. Dos horas de viaje en el tiempo para trasladarnos, en directo, a uno de los grandes conciertos de una de las banda de rock más famosas del Reino Unido, no solo por sus canciones sino por la leyenda que convirtió en mito a su líder, al fallecer, víctima del sida, en 1991.
En este memorable concierto de Astorga los músicos argentinos Pablo Padín, Francisco Calgaro, Ezequiel Tibaldo y Matías Albornoz se convirtieron en una mímesis perfecta de Freddie Mercury, Brian May, Roger Taylor y John Deacon, ajustando al máximo los parecidos, el vestuario y sobre todo las voces y las instrumentaciones. Fueron desgranando, uno a uno, todos los grandes éxitos de Queen. Canciones como “somebody to love”, “I Want to break free”, Save me”, “Bohemian Rhapsody” o “The show must go on”, por citar algunas de las más conocidas, fueron coreadas por los espectadores que llenaban la plaza y tenían pintado en sus caras un gesto entre admiración y sorpresa por lo que estaban viendo. Al final tuvieron que salir dos veces a rematar con sendos bises entre las aclamaciones del público.
Cuando volvíamos para casa con unos amigos, comentando el concierto y tarareando las canciones, estábamos todos de acuerdo en que había merecido la pena, que habíamos visto un espectáculo que en nada desmerecía y hacía un cumplido homenaje al Queen original y que no nos extrañaba que estos músicos argentinos hayan recorrido medio mundo con este espectáculo, siendo aclamados hasta en el Memorial Day Freddie Mercury organizado en Montreux en 2005.
Estupendo y original concierto, lleno de buena música, donde los protagonistas son atrapados irremisiblemente por el mito Freddie Mercury-Queen hasta olvidarnos de sus nombres y de su procedencia. Sí, amigos, ayer Freddie Mercury desayunó mantecadas en Astorga.
