Cuantos le conocieron en vida o tienen algún contacto con su legado material o espiritual saben que entre los preferidos de don Ángel Riesco estaban los niños, quien demostró una gran sensibilidad para ayudar a todos aquellos que pudieran necesitarlo, especialmente las familias que tenían que ejercer un trabajo fuera de casa para poder sacar adelante a sus hijos. Así, con ese deseo de «contribuir al bienestar de una ciudad a la que tanto amó», el 19 de marzo de 1964 nacía la Guardería San José, un centro educativo que durante medio siglo ha estado al servicio de cientos de familias y acogido a miles de niños de La Bañeza gracias al tesón de las Misioneras Apostólicas de la Caridad, que este domingo han iniciado los actos de celebración de este cincuenta aniversario.
Por las instalaciones de la Guardería San José, en la céntrica calle bañezana de Juan de Mansilla, a lo largo de este medio siglo han pasado varias generaciones de bañezanos pertenecientes a infinidad de familias llamadas por el carisma de las Misioneras, pero también muchos niños para quienes el acceso a un servicio educativo o el poder permanecer en un centro mientras sus padres acudían a trabajar era más importante que el poder costearlo en un momento en el que no existía la educación pública, tal y como se entiende hoy en día.
Por eso, del mismo modo que ocurrió con las publicaciones que puso en marcha, la creación del Instituto Secular que desde La Bañeza y desde la sencillez de «las que sólo han de aspirar a gastarse por Cristo» ha llevado la labor de las Misioneras Apostólicas de la Caridad a llevar el mensaje de don Ángel Riesco por todo el mundo, potenciar Acción Católica en la comarca, la fundación de una guardería bajo el patrocinio de San José hace ahora cincuenta años «es una efemérides de la que son protagonistas muchas familias bañezanas», en palabras de la directora general del Instituto, Mercedes Moratinos.
Amor a Cristo y al prójimo
Así, con el deseo de celebrar la festividad de San José y conmemorar los cincuenta años de la apertura de la guardería, las Misioneras Apostólicas de la Caridad celebraron una eucaristía en la parroquia de Santa María para compartir con La Bañeza, especialmente con las familias que han pasado por sus instalaciones, una misa de acción de gracias por este medio siglo de vida de una institución al servicio de la infancia, especialmente de los más necesitados que vieron en la Guardería San José las puertas abiertas de par en par.
Aunque Ciudad Misioneras acogió por la tarde el tradicional festival protagonizado por los últimos en llegar a la casa, muchos de aquellos ‘niños’ que desde 1964 han pasado por las aulas de la guardería se dieron cita por la mañana en la eucaristía en la que se pidió por las familias y por la pronta canonización del Siervo de Dios, cuyo proceso está abierto y cuya impronta ha marcado a varias generaciones de bañezanos. En el mes de junio habrá una serie de actos que las Misioneras están preparando con el fin de celebrar que el amor hacia Cristo y al prójimo impulsado por don Ángel sigue creciendo.
Un grupo de Misioneras posa ante la tumba del padre fundador, a un lado del altar de Santa María.
LA BAÑEZA, carece de un COMEDOR SOCIAL, para dar de COMER todos los días, a muchas personas, que por DESGRACIA están en la Calle.
Cáritas, hace una labor extraordinaria, pero no puede ni tiene medios
para hacerlo. Ahora al cumplirse los CINCUENTA AÑOS de CESIÓN GRATUITA de la Casa de las Misioneras, por parte de la propiedad, que es la Cofradía de la Santa Vera Cruz; es buen momento para RECUPERARLA y dedicarla además de guardería infantil “GRATUITA” (hasta ahora ha sido de pago); a un COMEDOR SOCIAL, porque PERSONAS SOLIDARIAS en LA BAÑEZA, han muchas y me consta que estarían dispuestas a colaborar en COCINAR y servir COMIDA CALIENTE a tantos pobres, que a diario, pasan por la Sacristía de la Iglesia de Santa María. Por otro lado, ya va siendo hora, que se construya la Capilla de la Cofradía de Santa Vera Cruz. D. Santiago Carrizo aconsejó con mucha sabiduría: HÁGASE LO QUE SE DEBA, AUNQUE SE DEBA LO QUE SE HAGA. Espero mi sugencia no caiga en saco roto. Gracias.
me alegro un montón por ellos ya que mi abuela fue allí y ha sido muy emotivo para ella.MUCHAS GRACIAS POR HABER DADO ESTA GRAN GUARDERÍA A ESTA CIUDAD TAN PRECIOSA EN LA QUE VIVO QUE SE LLAMA LA BAÑEZA Y GRACIAS POR TODO LO QUE HABÉIS HECHO PARA ESTA CIUDAD
Felicidades y gracias por todo el bien que han hecho a esta ciudad, que Dios se lo pague.