El Obispo de Astorga, Monseñor Jesús Fernánde, ha firmado recientemente el decreto para la organización diocesana con la creación de las nuevas Unidades Pastorales, una comunidad de fieles configurada como una agrupación de parroquias limítrofes, las cuales, conservando su identidad, sus derechos y deberes, están llamadas a formar una comunidad cristiana viva y orgánica, que se guía por criterios pastorales en clave misionera y sinodal y es confiada a los párrocos con la participación activa de los seglares y consagrados.
La Unidad Pastoral de La Bañeza estará coordinada por el sacerdote Juan Herminio Rodríguez Fernández, presbítero encargado de varias parroquias de la comarca bañezana y cuya misión es “integrar las parroquias locales en otras estructuras que nos faciliten afrontar los retos que nos presenta el momento actual”, tal y como se recoge en el decreto diocesano.
“Somos conscientes de la necesidad de una renovación pastoral que ha de incluir la conversión de los evangerizadores, la adopción de nuevas formas de evangelización y la renovación de las estructuras pastorales. Con esta renovación, no se pretende anular a las parroquias”, puntualiza el obispo, después de haber oído al Consejo Presbiteral, al Consejo Pastoral y al Colegio de Arciprestes además de recabar el parecer del Consejo Episcopal.
Los criterios y normas para el funcionamiento de las unidades pastorales son fruto “de un largo camino de reflexión y estudio, tras recoger sugerencias y aportaciones por parte de sacerdotes, consagrados y laicos. Se ha consultado también a distintas instituciones eclesiales y fruto de todo este trabajo son los presentes criterios y normas pastorales, así como el mapa de las mismas, para realizar una renovada pastoral evangelizadora y misionera que responda a lo que el Señor nos pide y la Iglesia necesita”.
