José Cruz Cabo
La Coral del Milenario ofreció hace días un concierto a ‘la luz de la farola’, en la plaza del Salvador, dentro del programa de las fiestas patronales. Nuestra Coral, dirigida por ese magnífico joven que es Jairo del Río, quien está demostrando que es un gran director y además sabe presentar las distintas canciones con simpatía, hizo la salida desde la iglesia hasta ponerse en los escalones de la plaza para cantar, donde el Ayuntamiento tuvo un lapsus de deficiencia al llevar tan pocas sillas para los muchos espectadores que acudieron escucharla, a pesar de que la noche estuvo fría.
El concierto fue un dechado de alegría, sentimiento, magnífica conjuntación de las distintas voces y un enorme deseo de agradar a los espectadores. Hacía tiempo que no podía escuchar a la Coral del Milenario, que llevo en mi corazón desde su inicio, hace casi treinta años, y con la que he vivido momento de una belleza musical impresionante desde su inicio y con la que he pasado vivencias increíbles tanto en nuestra ciudad como en los muchos viajes que realicé con ella y a través de los distintos directores de ambos sexos que ha tenido.
Fue una pena que la noche veraniega estuviera más bien fría, pero eso no impidió que Jairo y sus cantores nos llevaran a los más altos cielos musicales, porque su compenetración, su entrega y conjuntación hacen que nuestra coral siga siendo el mejor embajador que tenemos, de los muchos y buenos que existen actualmente. Y es que es una gozada ver cómo disfrutan cantando, qué empeño ponen en que todo salga perfecto y que la gente disfrute a tope de sus magníficas canciones. En este concierto hubo varios estrenos que mejorarán el repertorio y que nos hicieron gozar muchísimo de sus canciones, de sus voces y de su total entrega al canto coral. Gracias por vuestro concierto.
