La Diputación de León ha aprobado llevar a cabo el contrato a través del que se prestan los servicios de Ayuda a Domicilio en la provincia, destinando 16,387.785, 60 de euros para los próximos dos años, con la posibilidad de prorrogar el contrato durante otros dos años más. Así, cada anualidad, la institución provincial destinará a la prestación de este servicio 8,2 millones de euros.
En este momento los usuarios del Servicio de Ayuda a Domicilio son un total de 2.220 usuarios. De ellos, 1.643 son mujeres y 577 son hombres. Estas cifras suponen que el número de mujeres atendidas triplica al de los hombres. En el pliego de condiciones para llevar a cabo esta contratación aparece que los usuarios recibirán un total de 491.520 horas, a razón de 40.960 horas al mes.
La Diputación de León fue la única institución que, gracias a su compromiso, consiguió mantener el número de personas tras la regulación de intensidades, gracias a la celeridad en la aplicación del Real Decreto, poniéndolo en marcha el 1 de agosto de 2012. Por lo que se refiere al número de empleados, entre las dos zonas este servicio da trabajo a un total de 628 personas.
La implicación de la Diputación en la prestación de este servicio consigue dos objetivos principales. Por un lado, consigue el mantenimiento de la población en las zonas rurales, ya que las personas que lo necesitan son atendidas en sus propios hogares. Por otro lado, contribuye a la generación de empleo en el mundo rural, en especial a las mujeres, que en su mayoría son las que se encargan de atender a los usuarios.
La Diputación ha llevado a cabo un gran esfuerzo durante los últimos años para mantener el número de personas que se atienden desde este servicio, por lo que ha realizado inversiones mayores a las que le correspondían por Ley, con el objetivo de mantener el servicio a todos los usuarios a los que se atendía hasta la entrada en vigor de la Orden de la Junta de Castilla y León.
La institución provincial, a pesar de los recortes económicos que ha sufrido ha destinado desde 2007 un total de casi 50 millones de euros al servicio y mantiene su compromiso con los ciudadanos de la provincia atendiendo todas las solicitudes que tienen derecho a recibir el servicio y, en estos momentos incluso, ajustando las intensidades a lo que los usuarios piden y los trabajadores sociales de los CEAS proponen para cada caso.
Funciones
La Ayuda a Domicilio es un servicio que presta la Diputación de León a través del que se llevan a cabo actuaciones que se realizan en el domicilio de las personas en situación de dependencia, con el fin de atender las necesidades de la vida diaria. El objetivo es incrementar la autonomía personal de estas personas, haciendo posible que los usuarios no tengan que salir de su entorno y puedan permanecer en su domicilio el mayor tiempo posible.
La asistencia que se presta pretende evitar el deterioro de las condiciones de vida de las personas que están afectadas por situaciones de pérdida o disminución de su autonomía personal, además de apoyar a sus familiares y lograr un marco familiar saludable y una relación positiva con el entorno.
Se pretende también mantener a las personas mayores o discapacitados físicos o psíquicos que reciben esta ayuda en su mismo medio físico, familiar o social en el que desarrolla su vida diaria, con lo que se contribuye a evitar crisis o deterioros graves, personales o familiares, contribuyendo de la misma forma a evitar la despoblación en el medio rural.
Buscando en el artículo el nombre de la empresa a la que la Diputación le ha dado el servicio de ayuda a domicilio, por la extraordinaria cantidad de más de 16 millones de euros, no aparece.
La noticia parece el resumen de la nota que el gabinete de prensa de la diputación pasa a los medios de comunicación. Todos son números y “excelencias” .Adjetivos “autobombos” como… “única institución”, “gracias a su compromiso”, “celeridad en la aplicación”, “generación de empleo”, “gran esfuerzo”, “compromiso con los ciudadanos”…
Todo muy bonito, pero no se dice que este servicio, que antes lo gestionaba la propia diputación a través de sus servicios sociales, ahora se privatiza (también se le llama eufemísticamente externalización). Coincidimos en que es un servicio público imprescindible en nuestro mundo rural para que nuestros mayores dependientes puedan seguir viviendo en los pueblos.
Pero en otro aspecto no podemos coincidir: Los beneficios que va a obtener la empresa adjudicataria se podrían reinvertir en nuestros ciudadanos si el servicio lo realizara la diputación (que como organismo público no necesita obtener beneficios).
Y volviendo al titular … a qué empresa se le ha adjudicado este “servicio”.