A la izquierda, estado original de la estructura y a la derecha un detalle de los trabajos realizados en el puente de San Esteban.
La Diputación de León ha llevado a cabo recientemente obras de reparación de la cimentación en el puente sobre el río Eria, en San Esteban de Nogales, una obra de emergencia que ha contado con un presupuesto de 45.500 euros y que tiene como objeto garantizar la seguridad de los usuarios de esta infraestructura.
Durante la realización de los trabajos de vigilancia del estado de las vías pertenecientes a la Red Provincial de Carreteras, se observó que la cimentación de las dos pilas de esta infraestructura habían sufrido daños durante los últimos meses, por lo que la Diputación de León decidió llevar a cabo los trabajos necesarios para solucionar los problemas que pudieran surgir, con el objetivo de garantizar la seguridad de todos los usuarios de esta infraestructura.
El puente cuenta con una longitud de 62,8 metros, que se distribuyen en cuatro vanos de 15,70 metros cada uno, cimentados en el cauce del río. La cimentación de los dos primeros apoyos se encontraba en estos momentos totalmente descubierta, ya que había sido erosionada por la capa del lecho del río, formada por gravas y cantos rodados, con lo que se encontraba 1,5 metros por debajo de su cota habitual y en la unión de los pilares se encontraron fisuras.
Por todo ello, desde la Diputación se pusieron en marcha las obras necesarias para mejorar la situación del puente, protegiendo de la erosión los pilares y la unión entre la pila y la cimentación, mediante una pantalla de hormigón armado. Unos trabajos que han terminado recientemente y que han devuelto la seguridad al puente de San Esteban.
