Mucho público interesado en adquirir cerámica y buenas ventas es el balance que deja la trigésima edición de la Feria internacional de Alfarería de La Bañeza, una muestra que a última hora de la tarde de este lunes ha cerrado sus puertas después de cuatro días asentada en la Plaza Mayor de la ciudad. Un resultado «realmente satisfactorio» a pesar del cambio de fechas, ya que la cita sale del programa festivo de la Asunción.
Representantes municipales y de la Federación Interregional Alfareros de España clausuraron la muestra con la presentación de la tinaja gigante que ha sido modelada durante estos días por un artesano de El Alfar de Pereruela (Zamora), quien dio forma al torno a una pieza de barro que ronda el metro de altura y que lleva grabada una inscripción conmemorativa de esta feria. Durante estos días, además, no han faltado los talleres para niños con el fin de hacer la muestra más participativa.