Fotografía de archivo de un lechazo en una explotación ganadera leonesa.
La Junta de Castilla y León ha puesto el freno a su propuesta de modificar la definición de trashumancia, lo que supondría excluir al pastoreo tradicional de las ayudas por esta actividad. Así se desprende de la respuesta parlamentaria de la consejera de Agricultura y Ganadería, Milagros Marcos, al viceportavoz del Grupo Socialista en las Cortes, Tino Rodríguez.
La representante del Ejecutivo autonómico expone en su escrito que “la información de partida surgió en un grupo de trabajo técnico a título de propuesta”. Añade que, no obstante, “las condiciones finales se determinarán de acuerdo a las alegaciones presentadas y que el texto final que se adopte será enviado de nuevo a las organizaciones profesionales agrarias. Cabe recordar que la propuesta inicial ya se hizo llegar a estas organizaciones.
Esta propuesta “pretendía excluir el movimiento de ganado dentro de una misma provincia, la denominada trasterminancia, de la clasificación de trashumancia y, por tanto, de las ayudas previstas por este concepto”.
La Dirección General de Producción Agropecuaria, dependiente de la Consejería de Agricultura y Ganadería, presentó a las organizaciones profesionales una nueva definición para la trashumancia “cuando se realiza el desplazamiento de animales para el aprovechamiento de pastos de forma estacional, en al menos un movimiento de ida y otro de retorno a la explotación de origen, entre distintas comunidades autónomas, y si es dentro de la misma autonomía, entre comarcas que disten entre sí más de 200 kilómetros”.
El también secretario general del PSL-PSOE ya denunció en su día que la propuesta de la Junta evidenciaba un “gravísimo desconocimiento sobre la realidad que tiene que administrar ya que, sólo en León, el movimiento estacional del ganado dentro de la propia provincia supera las 50.000 reses de ovino, vacuno y caprino”. “Supone un ataque directo al pastoreo tradicional que se viene practicando en la provincia de León desde que existe ribera y montaña”, alegó.
La trashumancia como tal no ha sido definida en ningún momento de forma oficial, de modo que, para las ayudas que actualmente reciben los ganaderos por esta actividad de pastoreo, se vienen tomado como referencia las explotaciones que realizan movimiento de animales en un radio de más de 50 kilómetros. Las organizaciones profesionales agrarias que manifestaron su oposición a la modificación que abanderaba la Dirección General de Producción Agropecuaria incluyen razones sanitarias entre los motivos para incentivar el movimiento de ganado dentro de la misma comunidad en lugar de potenciar el trasiego con otras comunidades.
