La pesca recreativa se ha convertido en una importante fuente de riqueza para muchas localidades. Conscientes de las posibilidades económicas que ofrece, la Junta se ha propuesto mejorar la regulación del sector incidiendo en el apartado turístico, con el fin de potenciar el turismo rural en Castilla y León.
Así lo recoge el nuevo reglamento que prepara la Consejería de Fomento y Medio Ambiente, donde se hace especial hincapié en el permiso que se concederá a las empresas especializadas en este tipo de turismo, cada vez más en auge. Por este motivo, y para garantizar más ingresos en las zonas pesqueras, la normativa recoge que “será requisito imprescindible la pernoctación del pescador en un alojamiento turístico la noche anterior al disfrute del permiso o la siguiente”. La medida tiene como objetivo potenciar el turismo rural y evitar que pescadores llegados desde otras regiones pesquen y regresen a sus localidades de origen sin haber dejado ingresos en la zona.
Para ello y con el fin de velar para que este tipo de empresas cumplan con sus fines turísticos, la Junta las obligará a presentar anualmente ante la dirección general competente “una declaración responsable de los servicios turísticos prestados a los pescadores beneficiarios de los permisos”. Se trata de una documentación que deberán conservar durante al menos dos años para que la administración pueda comprobarla siempre que así lo considere.