Hay muchos bañezanos de fuera que siguen el devenir de la ciudad desde su lugar de residencia, muchos acuden a las fiestas o al carnaval, otros no vienen nunca. Me gusta mucho charlar con ellos, sentir su pulso, saber cómo nos ven desde la distancia. El bañezano de este momento musical que voy a contaros hoy lleva en Andorra más de 30 años. Allí tiene su trabajo y su vida pero, inevitablemente, en noviembre o diciembre aparece por La Bañeza.
Sus amigos más cercanos le esperan con cariño y mientras él está aquí, se preocupan por hacerle la vida agradable en este duro invierno. Yo he compartido con él muchos buenos momentos de música y bodega, buenas noches de cena y sobremesa. Todo eso viene a cuento porque hoy, Manolo Corredera, que así se llama este bañezano de la diáspora, me regaló un disco que ha grabado para sus amigos. Manolo fue pinchadiscos en sus años mozos, conoce la música de aquella época y quiso compartirla ahora, tantos años después.
Es sábado de invierno. Cambio los planes. Enciendo el fuego de la chimenea de mi estudio y, mientras se queman unos cuantos troncos, oigo el cd que ha grabado Manolo. Dos horas y media de música maravillosa. Los ojos ensimismados en el fuego, el oído borracho de buenas melodías y la mente en aquellos momentos de juventud, sublimados por el paso del tiempo.
Pink Floyd me dice que ojalá estuvieras aquí. “Wish you were here” que habla de la ambigüedad de la vida: SO, SO YOU THINK YOU CAN TELL / HEAVEN FROM HELL / BLUE SKIES FROM PAIN / CAN YOU TELL A GREEN FIELD / FROM A COLD STEEL RAIL?. / A SMILE FROM A VEIL? / DO YOU THINK YOU CAN TELL?
Crees que puedes distinguir / el paraíso del infierno / cielos azules del dolor / Puedes distinguir un campo verde / un frio raíl de acero / Una sonrisa de un cumplido / ¿Crees que puedes distinguir? Esta canción que comienza con una radio, donde los Pink Floyd se acuerdan de los viejos tiempos cuando Syd estaba con ellos.
Las percusiones y el viento-metal de Obsivisa, lo mejor para bailar en carnaval. La voz melodiosa de Paul Carrack el cantante de Mike & the Mechanics ataca “The story so far”: THE SKY WILL NEVER LOOK THE SAME AGAIN,El cielo no volverá a ver lo mismo otra vez.
Echo otro tronco al fuego mientras Carlos Santana me recuerda su “Samba para ti”, para dar paso a Queen y su “Bohemian Rhapsody”, donde Mercury mide su voz con los grandes divos del bel canto. “Knocking on the heavens door”, dice Dylan: Mamá, no puedo usar más esta insignia / Esta anocheciendo / Me siento como tocando las puertas del cielo.
El regalo de Manolo Corredera. / AOA
Son muchas canciones las que ha grabado Manolo y ninguna tiene desperdicio. Todas llenas de recuerdos que atacan mi memoria. No os las puedo comentar todas, tendría que escribir una novela. Ahora es Murray Head con su “Said it Ain´t so Joe”. Billye Preston canta “My Sweet Lord” y Brian Adams en “Everything I Do, Do it four you”, Todo lo que hago lo hago por ti, una canción maravillosamente lenta que bailamos muchas veces intentando que entre la elegida y uno no pasara ni una gota de aire: LOOK INTO MY EYES YOU WILL SEE / WHAT YOU MEAN TO ME, Mira dentro de mis ojos y verás lo que significas para mí.
Chicago, Creedence Clearwater Revival, Deep Purple, con su humo en el agua, Eric Clapton y su “Cocaine”, Rare Earth, Simón y Garfunkel, los Rolling y su “Angie”, los Beatles “In my life” o el “Hotel California” de Eagles. Todavía quedan muchas más canciones en el disco de estas navidades para unos pocos privilegiados.
Ahora está sonando “Stairway to heaven”, la escalera al cielo de Led Zeppelin: THERE´S A LADY WHO´S SURE ALL THAT GLITTER IS FOLD / AND SHE´S BUYING A STAIRWAY TO HAVEN. Hay una dama que está segura de que es oro todo lo que reluce y va a comprar una escalera al cielo.
Siento frío. Se han acabado la leñas que ardían en la chimenea y hace ya un rato que acabó el disco. Me quedé perdido en los recuerdos promovidos por ese montón de canciones que componen parte de la banda sonora de aquella ciudad de mi juventud, una ciudad que era el centro del mundo y Manolo Corredera, “El Maño”, “El Indio”, “Briti”, Santi, mi primo Manolín, o Paquito “Carina” por citar a alguno de los los reyes de la cabina de Tiffany´s, Mayro´s, Las Palmeras, Ramsés II y Jai Alai. Luego ya vino Hotachy, el Lennon y otros muchos pubs, pero esto ya es otro momento. Muchos lo han celebrado en una gran fiesta estas navidades. Nos estamos haciendo mayores, pero nadie nos puede quitar nuestros recuerdos.
Gracias Manolo por esta tarde de música y fuego de chimenea con la que no contaba y que me ha hecho sentir aquella misma sensación en el estómago que sentía cuando sonaba la canción que esperaba y me encontraba con los ojos de la destinataria de la melodía.
