Puesto instalado en el mercadillo por Manos Unidas.
Manos Unidas de La Bañeza ya ha comenzado sus actividades enmarcadas dentro de la campaña nacional contra el hambre, una cita que la organización de la Iglesia Católica convoca cada mes de febrero en busca de la solidaridad de los ciudadanos con los países en vías de desarrollo, y que en esta ocasión ha encomendado a la Diócesis de Astorga tres proyectos para financiar.
En concreto, la delegación diocesana tiene la misión de recaudar fondos para actuaciones en Colombia y la India, que abarcan distintas áreas desde la educación para niños afectados por la violencia étnica hasta el aprovechamiento de los recursos naturales.
Así, los planes que se realizarán en la India se destinan a dos zonas diferentes; el primero de ellos tiene como objetivo la recuperación y retención del agua de lluvia con el fin de aprovechar los recursos naturales de la zona, con un coste de 54.370 €.
Otro de los proyectos encomendados a la generosidad de la Diócesis de Astorga supondrá una inversión de 25.678 euros y consiste en realizar un programa de educación para niños afectados por la violencia étnica.
Y, finalmente, el plan destinado al país latino supone un coste de 85.747 euros y tiene como misión un plan cultural destinado a los pueblos indígenas amazónicos. Por ese motivo, este mismo sábado, algunas voluntarias de Manos Unidas ya estuvieron presentes en el mercado semanal con un puesto de venta de plantas y camisetas de la última campaña.
Sin embargo, una de las actividades que cuenta con mayor implicación de los bañezanos es la ‘operación bocata’, que se realizará este miércoles en los cinco centros educativos de la ciudad y que por 2,50 euros los jóvenes tendrán un bocadillo y una botella de agua. En este sentido, la delegada local de Manos Unidas, Lolita Perandones, recordó que los voluntarios que deseen donar tortillas para elaborar los bocadillos podrán hacerlo el martes por la tarde y el miércoles por la mañana en la sede de Acción Católica.
