La iglesia parroquial de Santa María de La Bañeza acogió este mediodía una sencilla celebración religiosa con motivo de la festividad de Santa Águeda, patrona de la cofradía de mujeres que lleva el nombre de la mártir y que tradicionalmente celebra su efeméride el domingo posterior a la fiesta reseñada en el calendario litúrgico.
Este año, por la pandemia, no hubo bailes ni petición del bastón de mando en el ayuntamiento ni tampoco el reparto de pastas ni comida de hermandad y los actos se redujeron a una misa para un reducido grupo de hermanas oficiada por el sacerdote Jerónimo Martínez en la que no faltó el estandarte de la cofradía ni la Águeda Mayor, Miri Cuervo, con el cetro de la Santa y las damas que integran la directiva.
En el transcurso de la celebración religiosa se recordó a las socias fallecidas y se pidió la intercesión de Santa Águeda por la salud de las féminas. Varias de ellas acudieron con mantones de manila como parte de la indumentaria que tradicionalmente visten en esta fiesta anual.