P.J. Abajo
La Virgen de la Soledad lucirá en la próxima Semana Santa sus cuatro ángeles con la nobleza original que su autor le dio hace más de un siglo, después de haber finalizado el proceso de restauración de las cuatro piezas de imaginería religiosa gracias a un trabajo minucioso y constante por parte de la joven Silvia Mantecón, quien lleva años trabajando de forma desinteresada para ayudar a recuperar el patrimonio de la cofradía de las Angustias.
El cabildo de la hermandad presentó ayer los trabajos de restauración que se han llevado a cabo durante algo más de un año y que han consistido en devolver el aspecto original a estas cuatro esculturas talladas en madera y de unos 55 centímetros de alto, un “proceso largo y minucioso, respetando siempre los criterios de mínima intervención y los tiempos de secado de los materiales”, según explicó la encargada de eliminar las distintas capas que las épocas transcurridas desde su creación habían dejado impregnadas en las piezas.
La retirada de varias capas de pintura dorada (purpurina) y estucos que habían ocultado la naturaleza del material original ha sido una tarea en la que también se han reparado las grietas que la humedad, el paso del tiempo y las vibraciones derivadas de los movimientos al procesionar habían deteriorado estos cuatro ángeles sobre los que se colocan otros tantos candelabros en el trono de la Virgen de la Soledad, imagen cotitular de la hermandad bañezana.
A la izquierda, se ve una de las figuras ya restauradas. A la derecha, proceso de restauración. / Fotos: Luis Mantecón
Nobleza frente a policromía
“Sacar a la luz la nobleza de la madera frente a la policromía de las distintas épocas” ha sido uno de los principales retos para Silvia, bañezana y técnico superior en Artes aplicadas a la escultura y titulada en Conservación y Restauración de Bienes Culturales y Patrimoniales que está realizando numerosos trabajos para la cofradía de Angustias y Soledad con el fin de recuperar su patrimonio artístico y garantizar la conservación de un legado artístico para las generaciones futuras.
La Oración volverá a León
En otro orden de cosas, representantes de la cofradía bañezana de Nuestra Señora de las Angustias y Soledad y de la hermandad de Santa Marta y la Sagrada Cena de León también mantuvieron ayer un encuentro institucional para acordar que la imagen de la Oración en el Huerto de los Olivos procesione en la capital leonesa el próximo Lunes Santo, 25 de marzo.
Como se recordará, la iniciativa de que la talla de la cofradía de La Bañeza tuviera una representación en el Rosario de Pasión que organiza la hermandad con sede canónica en San Marcelo se puso en marcha el año pasado pero las lluvias caídas aquel 2 de abril impidieron que saliera el desfile.
Según el presidente de Santa Marta y la Sagrada Cena, Javier Gavilanes, la idea de la hermandad es “poner en valor las obras de la imaginería leonesa desconocidas en la capital y la cofradía bañezana de las Angustias tiene mucho material que hay que dar a conocer en León”.
La restauradora presentó los últimos trabajos realizados para la cofradía de Angustias y Soledad.
Menos mal que han decidido quitar las muchas purpurinas a las que tan aficionados han sido. La peor de todas la que estropeó la maravillosa urna del Cristo Yacente.
Esta chica vale mucho; así lo ha demostrado en repetidas ocasiones.
Enhorabuena Silvia y gracias por todo tu trabajo en pro de la Cofradía de Las Angustias.