Después de dar marcha atrás respecto a los aranceles que se iban a imponer a México y Canadá por parte de Donald Trump, los mercados han notado un cierto alivio, si bien, el otro gran damnificado de los mismos China, ha contestado con subidas entre el 10 y el 15% a la importación de productos de EEUU que de momento no incluyen los agrícolas.
En el aspecto meramente agronómico continua la preocupación por el estado del cultivo del trigo en Rusia al estar desprotegido de las heladas, según las últimas proyecciones del propio Gobierno, la exportación de cereales para 2.025 podrían caer un 31% (más de 23 millones de toneladas), además recordar que a partir del 15 de febrero hasta el 30 de junio entra en vigor un impuesto a la exportación de cereales con el fin de contener la elevada inflación que sufre este país, lo que hará ralentizar nuevos embarques.
El exceso de humedad en Brasil está complicando la recolección de la soja cuyo retraso puede influir negativamente en la siembra del maíz como segundo cultivo en esas mismas fincas, además a esto hay que añadir que persiste la sequía en Argentina.
Continúa una semana más la tendencia alcista tanto en el ganado de vida como en la carne en el sector del vacuno. Ligera baja en el forraje de 5 euros en tonelada, el resto de los productos repite.