Corría el 2002, era Semana Santa y Luis González Ferreras, en adelante Pele Ferreras, ha llegado a La Bañeza y lo primero que ha hecho es una visita a Conrado Blanco que le ha entregado unas fotocopias del epistolario cruzado entre el Padre Miguélez y el gran poeta catalán Jacinto Verdaguer. Ese año 2002 se estaba celebrando en toda Cataluña el centenario de la muerte de este insigne escritor catalán y Pele Ferreras quería curiosear en esa relación, que Conrado le había contado, entre Verdaguer y Miguélez. Quería saber la importancia de aquel bañezano que ayudó a la rehabilitación sacerdotal del padre de las letras catalanas, sobre el que se había decretado la “suspensión a divinis” dentro del seno de la iglesia.
Aquellas cartas agudizan la curiosidad de Pele Ferreras que comienza a buscar, a seguir las pistas que van apareciendo, muchas de esas pistas le conducen al Escorial, allí encuentra el manuscrito “Verdaguer en Madrid. Historias íntimas” que edita en Ediciones del Curueño de La Bañeza y presenta en Folgueroles, pueblo de nacimiento de Verdaguer, el 17 de mayo, día de su cumpleaños,, en un acto precioso al que asistimos algunos bañezanos. Hago memoria y espero no olvidar a ninguno: Conrado Blanco, Javier Menéndez y familia, Elvira Gutiérrez, José Bécares, Manolo Raigada, Salvador Jambrina, Ignacio Alonso Y José Víctor Otero, acompañados de sus mujeres, su hermana Sofía, su cuñado Santi y su sobrina Sofía. Pudimos comprobar cómo valora este pequeño y precioso pueblo catalán a su poeta y nos sentimos importantes acompañando a Pele Ferreras como embajador de Miguélez.
Pele Ferreras que, como ha quedado ya reflejado, es un curioso y tiene el fino olfato del detective, ha sido así toda su vida. Este aparejador que estudió la carrera en Barcelona, pronto recala en Chicago, para después vivir en Londres y cerrar su círculo laboral en Barcelona, donde se ha prejubilado recientemente de la empresa japonesa de construcción Shimizu, segunda empresa mundial de construcción. Este párrafo sirve para demostrar el talante viajero de este atípico investigador bañezano.
Cartel. / Diseño: AOA
Con su anterior libro editado como tarjeta de visita, Pele se mueve en el mundo de los Agustinos, contacta con los más importantes intelectuales de la orden y va buscando “El calvario de un poeta”, manuscrito inédito de Manuel Fraile Miguélez que no ha aparecido todavía. Entretanto Pele publica sus investigaciones en la Revista de Estudios Franciscanos y realiza una edición de “Jansenismo y Regalismo” del Padre Miguélez en la prestigiosa editorial Agustiniana.
Pele Ferreras se ha convertido en todo un especialista en el Padre Miguélez, pero todavía le quedan capítulos desconocidos de este bañezano. Uno de ellos es el de su estancia en México. Este año, entre octubre y noviembre se embarca en la aventura americana del fraile y se dirige a San Luis de Potosí, para tratar de traer de primera mano datos que nos aclaren esta etapa menos conocida de este paisano del que todos los bañezanos asocian su nombre a la céntrica calle del Teatro o la Biblioteca, pero pocos le conocen.
El día 7 de diciembre de 2011, a las 20:30 h. en la Biblioteca Municipal de la calle Padre Miguélez (se fijan en la coincidencia) Pele nos trae “tras los pasos del Padre Miguélez en México”, por gentileza de la Fundación Conrado Blanco y el Ayuntamiento de La Bañeza. Pele Ferreras, ese curioso que ha hecho del Padre Miguélez un revulsivo a su vida, nos lo cuenta. Seguro que nos sorprende.
