P.J. Abajo
Roberto Martínez del Río, bañezano afincado en Salamanca, es un coleccionista conocido por disponer de un museo con cerca de 2.500 piezas, pero sin sala de exposiciones donde se puedan contemplar; la idea es exclusiva y el Museo Internacional del Estudiante lleva años pidiendo una sede física para su colección de objetos relacionados con el mundo estudiantil, mientras la red sirve de sala ‘mundial’.
A través de la web www.museodelestudiante.com se puede descubrir la dimensión de una gran colección documental de un bañezano que lucha por conseguir un lugar para su museo y, ante la pasividad de las instituciones salmantinas, se ha visto obligado a repartir entre su domicilio charro y la casa familiar en La Bañeza el tesoro que ha ido recopilando durante décadas.
Así, cientos de láminas, grabados, fotografías, indumentaria, distintivos, partituras, y objetos relacionados con la novela y el teatro universitario son algunos de los objetos que conforman esta colección en la que destacan los llamados ‘Pliegos de Cordel’, de los que el museo tiene casi 200 piezas.
Como uno de tantos bañezanos que se fueron a estudiar a Salamanca, Roberto Martínez nació en La Bañeza en octubre de 1971 y se trasladó en 1991 a la capital charra para cursar estudios universitarios; sin embargo, al contrario de lo que hace la mayoría de los estudiantes una vez que se licencian, se quedó a vivir allí y comenzó su genial idea.
Además de dirigir el Museo, el creador ha sido comisario de varias exposiciones, compositor musical y jurado de numerosos premios y certámenes. También, en el ámbito académico, ha impartido conferencias en universidades y museos de Italia, Bélgica, Polonia, México, Portugal y España.
Por el momento, a falta de un museo ‘palpable’, la tecnología y la red hacen posible que pueda seguir adelante con su proyecto este bañezano que constantemente está investigando, recopilando piezas y ampliando los espacios del Museo Internacional del Estudiante, único en el mundo, sin ningún tipo de ayuda económica.
Sin embargo, ante la pasividad institucional en Salamanca, el amor por lo universitario ha llevado a Roberto a vivir momentos de tal desencanto que se ha planteado la posibilidad de llevar el proyecto expositivo a otras ciudades españolas, una cuestión en la que, probablemente, su Bañeza natal no le daría la espalda.
Balance
El Museo Internacional del Estudiante cerró el año 2010 con la incorporación de 280 nuevas piezas, en la mayoría de los diecisiete apartados en que se divide la colección, que ya alcanza las 2.500. Un sinfín de ejemplares entre los que figuran grabados, pliegos de cordel o indumentarias de distintos periodos y nacionalidades son algunas de las novedades que el bañezano Roberto Martínez del Río incorporó a su colección particular el pasado año.
La originalidad del Museo también hace que destaque en las adquisiciones, como una espada del siglo XIX (usada por los estudiantes alemanes para batirse en duelo), una pipa de fumar de 1912, un azulejo de Manises con más de 150 años de antigüedad o una jarra de cerveza decimonónica. El Museo Internacional del Estudiante también tiene su espacio en la red social Facebook, donde más de 4.000 seguidores conocen cada semana una nueva pieza.
Las manos impacientes de tienen hacia las notas de examen que el bedel va repartiendo. / Foto: Colección Museo Internacional del Estudiante
María: Yo también estudié en Salamanca, creo que ampliaría la oferta de turismo a Salamanca, no es un proyecto que debieran despreciar.
yo me he pasado por su página web y creo que tiene un gran mérito, debe costar bastante pasta hecerse con todas esas antiguedades.
Como soy antiguo alumno de la Universidad de Salamanca, de su Facultad de Derecho para ser más preciso, sé interpretar muy bien lo que leo, María. Igual que sé que muchas colecciones privadas han terminado siendo museos públicos semi- públicos. Eso no significa que cualquier colección tenga que ser pública, igual que decir ésto, no supone que se esté en contra de la cultura.
Bien dicho María, a mi me parece mas interesante un museo del estudiante en Salmanca que uno de las alhajas en La Bañeza, seguro que era mas rentable….. Animo Roberto!
Evaristo, malinterpretas la información. No pide nada a La Bañeza. Solo te informan, esa colección, museo o llamalo como quieras tiene sentido en una ciudad con universidad como Salamanca, ¿piensas que tiene mas sentido un museo del automovil en Salamanca con fondos públicos? pues lo hay. Salamanca está llena de edificios de propiedad pública que solo dan gastos pues no se usan. Esta pudiera ser una forma de rentabilizar alguno, ¿no te parece? creo que te precipitas en tus apreciaciones, de colecciones privadas empezaron todos los museos del mundo, y nuchas son cedidas a museos públicos para que el resto los conozcamos. Pero si despreciamos en vez de apoyar la cultura…..
A ver si no nos volvemos locos. Si este señor quiere que todo el mundo vea lo que lleva años coleccionando, me parece muy bien, que monte él un museo o que se busque un patrocinador privado, pero los dineros públicos no están para montarle museos a todo el que se le ocurra.
Casi siempre es así desafortunadamente!
Pero cuando se interesen por su obra desde otro lugar, otra comunidad autonómica por ejemplo, entonces aparecerá algún nacionalista, u oportunista con su discurso recordándonos algún pasaje histórico y demás. En fin mas de lo mismo en nuestra querida España, esta España mía, esta España nuestra….
Enhorabuena Roberto. Esperemos que tu idea se materialice cuanto antes. La Bañeza no te dará la espalda.