Estos pequeños concejalitos se sienten como en casa en el sillón el alcalde. / Foto: R. Prieto
Los niños siempre han sido y serán imprevisibles; no hace falta que nadie les diga lo que tienen que decir porque es empeorar las cosas y siempre habrá esa espontaneidad que hace a un niño visitar el consistorio y soltarle a la Teniente de Alcalde en el primer ataque: “Yo de mayor quiero ser alcalde o Rey”.
Como que no le decía nada el niño, ésta fue una de las sentencias más destacadas de las muchas que ayer se presentaron en el salón de plenos por parte de los 12 niños del campamento urbano que el Ayuntamiento de La Bañeza organiza cada verano junto con la Asociación Zascandil.
Ayer tocó la visita a la casa consistorial bañezana, donde fueron recibidos por la Alcaldesa en funciones, Piedad del Río, y la concejala de Cultura, Carmen de la Torre. En la casona estuvieron en el salón de plenos y allí aprovecharon para preguntar de todo; desde los personajes de los cuadros hasta por los otros individuos -menos famosos- que ocupan las sillas que en esos momentos les servían a ellos de asientos, aunque les quedaran ligeramente espaciosos. Todo llegará…
La visita al ayuntamiento siempre causa expectación en los campamentos de verano porque saben que es un lugar importante, donde están los que mandan; sin embargo, como eso del poder no lo tienen del todo claro, incluso uno de los más atrevidos se lanzó a pedirle a la Sra. del Río que le preguntara a José Miguel Palazuelo “si le gustaba mandar”. Ahí es nada.
Los niños aprovecharon la visita para obsequiar a las concejalas con unos dibujos del escudo de La Bañeza y del carnaval que habían realizado en el propio campamento; las ediles correspondieron tan distinguida visita con unas bolsas de caramelos y un cuento a los niños para que no olviden su paso por un lugar en el que se toman decisiones tan importantes.
