Ibañeza.es

Rafa Garcel durante un momento del concierto en el teatro bañezano.

El Teatro Municipal de La Bañeza ha recibido este fin de semana un gran espectáculo: “Rafa Garcel. Homenaje a Antonio Molina”, en gira de teatros por toda España y que después cruzará el charco para ir a Sudamérica, con extraordinarias críticas y asistencia de público. Un concierto donde además de Rafa Garcel y sus músicos, interviene Miki Molina, uno de los hijos del genial malagueño.

El espectáculo podemos decir que fue de champions league por emplear un símil futbolístico, un concierto en toda regla al que no le faltó de nada. En un formato novedoso donde se mezclan las imágenes en pantalla gigante, las presentaciones de Miki Molina, el sensacional sonido y maestría de los músicos y la voz maravillosa de este joven malagueño que, como él dijo: “Molina es inimitable y como él no hay ninguno”, pero él se le aproxima mucho.

Retazos de la vida de este cantante inimitable van pasando por la retina de unos espectadores entregados a la magia del mejor directo, con un trabajo de iluminación muy logrado y unas coreografías espectaculares y un vestuario muy cuidado de las dos bailarinas.

Una a una, Rafa Garcel, con el estilo de su maestro lleno de melismas agudísimos, en esa tonalidad a la que muy pocos cantantes llegan, fue desgranando las grandes canciones de Molina “Entre mi abuelo y Molina”, “El macetero”,” María de los Remedios” “Yo quiero vivir contigo”, “Yo quiero ser matador” , “la hija de Juan Simón”, “Adiós España”, “Cocinero, cocinero” “De contrabando”, Lla estudiantina madrileña” “Ángela del alma mía” y para terminar “El agua del avellano” y el celebérrimo “Soy minero”, además de unos fandangos de la cosecha. Todo ello envuelto en el magisterio de los arreglos al piano de Juan Carlos Martín, la extraordinaria guitarra flamenca de Daniel Valenzuela, muy bien arropados por la base rítmica de contrabajo y percusión.

Conexión total con el público desde el primer momento. Tanto Rafa Garcel como Miki Molina dedicaron canciones y mencionaron a los aficionados locales que les han arropado estos dos días, en concreto a Salvador Alonso, que les entregó unos poemas que hizo a Antonio Molina hace 20 años que emocionaron a Miki.

Un espectáculo de muchos quilates que no ha tenido la respuesta de público que se merece. Un concierto por el que, en cualquier otro lugar, tendríamos que pagar una entrada más cara que la de La Bañeza. Hay que diferenciar al profesional del aficionado, y este escenario, las dos noches de este fin de semana, estuvo lleno de excelentes profesionales.

-1- LA BAÑEZA FC: Nacho, Rubén, Rodrigo (Cheve m.75), Peru, Acinas, Monchi, Andrés Rubio (Jairo m.70), Noé, Ricardo (Álvaro m.75), Gelo y Villodres

-2- CD LAGUNA: Asenjo, Yeray, Andrés, Toño, Chencho, Tragu, Martín (Diéguez m.85), Alvarito, Guillermo (Jorge m.76), Ivi y Álvaro (Nano m 80)

Árbitro: Alonso Merino (colegio zamorano), auxiliado por Figuero Pérez y Ruano Moreno. No influyó en el resultado aunque tuvo decisiones diferentes antes situaciones idénticas.

Amonestaciones. La Bañeza: Peru, Noe y Monchi. CD Laguna: Toño, Ivi, Tragu (roja m.80).

Campo:La Llanera. Terreno en óptimas condiciones. 350 espectadores.

Goles: 1-0: m. 20, Monchi. 1-1: m. 65 Toño, 1-2: m. 77 Tragu

El partido tuvo dos tiempos muy definidos, superioridad de los bañezanos en la primera parte y mayor dominio de los pucelanos en la segunda. Fue Monchi, de cabeza, el que abrió el marcador en un córner sacado por Peru. Los bañezanos llegaban a la meta visitante aunque no lograban finalizar las jugadas en gol una veces por los desaciertos propios y otras por las acciones del mejor jugador del partido, el portero visitante Asenjo.

En la segunda parte el Laguna salió convencido de que podía y los bañezanos perdieron la posición en el campo. Los locales se echaron atrás y de fueron del partido. Una falta en el medio del campo es despejada por la defensa bañezana y el rechace lo empalma de volea Toño, logrando un gran disparo que hace un efecto extraño. Nacho tapado por los compañeros y el sol que le cegaba, no pudo evitar el empate.

El encuentro pudo desnivelarlo Gelo en los minutos 69 y 70, pero una vez el poste izquierdo y otra un paradón de Asenjo lo impidieron. En el minuto 75 el entrenador local se disponía a hacer un doble cambio (Cheve y Álvaro) cuando en un saque de banda sin peligro, la defensa bañezana se despista y es Tragu el que se aprovecha lanzando un tiro raso y no muy fuerte, pero que supera a Nacho entrando el balón pegado al palo derecho.

Los bañezanos no se lo creían, los cambios y la expulsión, muy rigurosa, de Tragu en el minuto 80, llevaron la incertidumbre a La Llanera. Cheve se quedó delante del portero pero el último toque se le fue perdiendo una ocasión muy clara. En los últimos minutos se sucedieron jugadas a balón parado que no consiguieron modificar el marcador. El colegiado, sin apenas descuento, pitó el final de un encuentro que supone la primera derrota en su feudo de los bañezanos. El Laguna ha sido con diferencia el mejor equipo que ha pasado por La Llanera.

La próxima jornada el equipo morado de desplaza a Valladolid para enfrentarse al gallito de la categoría, el Universitario, que aún está invicto.

El ser humano desde el principio de los tiempos ha tenido la necesidad de crear símbolos que representen las cuestiones importantes de su existencia, signos que estén por encima de lo efímero de la vida para poder transmitir su mensaje al futuro.

Hoy vamos a incorporar uno de estos símbolos a nuestra vida. Una idea que representa los logros conseguidos por los bañezanos en la exaltación de nuestro Carnaval. Una escultura que le dedicamos a los carnavaleros que ya no están entre nosotros y que también transmitimos a las generaciones venideras. Esta obra simboliza los sentimientos encontrados y antagónicos que suceden en la vida y en el propio carnaval, ese ying-yang, ese blanco y negro, ese juego de contrarios que cuando confluyen y se equilibran forma algo único e irrepetible.

Algunos bañezanos aprovecharon para inmortalizar en vídeo este momento tan importante.

Lo que surgió en un pequeño boceto en una servilleta, allá por 1995, se convirtió al año siguiente en un cartel de carnaval. Luego tomó forma de pin y se paseó en la solapa de bañezanos y visitantes, también se convirtió en pequeña escultura de hierro y bronce, incluso participó en alguna escenografía en el antiguo Teatro Pérez Alonso y alguna vez lo he visto por la calle, en forma de disfraz. Este símbolo que surgió aquel día de 1995 en una mesa del café Royal, mientras jugaba con un bolígrafo y una servilleta, tiene vida propia y se ha sabido ganar un sitio dentro de la iconografía carnavalera hasta convertirse en una mole de 22 toneladas de acero con una grandeza y un poderío ante la que me siento empequeñecido.

Siempre me gustó trabajar con los artesanos que han colaborado conmigo. Ellos se convierten en tus manos. Tú les trasmites el concepto, la idea y ellos la interpretan en el material escogido. Carpinteros, fundidores, herreros, sabedores de su oficio que dan forma a tus sueños. Hago esta reflexión para explicar la importancia de estos profesionales en la consecución final de la obra que hoy inauguramos. Viene a mi memoria la Fundición Patricio Echevarría y su importancia en la fabricación del “Peine de los Vientos” de Eduardo Chillida o la gran técnica del ceramista Llorens Artigas en los murales cerámicos de Joan Miró.

Para conseguir llevar a buen término esta importante pieza de acero ha sido necesario que el Ayuntamiento de La Bañeza acordara levantar un monumento al Carnaval en la Plaza del mismo nombre, que apostara por el símbolo creado por mí y después se decidiera que fuera realizado por la Escuela Taller de La Bañeza.

A partir de este momento entra en juego una institución modélica con su director Alberto Rodríguez Peñín a la cabeza. Alberto se ha jubilado con esta obra y quiero que esta obra también sea un homenaje a él, por su gran profesionalidad demostrada a lo largo de su ya largo periplo en esta casa.

Todas mis ideas sobre este símbolo y mis dibujos previos fueron captados perfectamente por el profesor de metal Gaspar Martínez, verdadero artífice de la realización material de la obra, que supo transmitir a su equipo de alumnos el amor por este antiguo oficio de la herrería. Fueron varios meses de trabajo duro donde la pieza iba tomando forma gracias a los martillos y sopletes de estos chavales que han aprendido un oficio con el que podrán ganarse la vida y que tendrán en este monumento al carnaval un recordatorio importante de su primer trabajo. Gracias Gaspar por tu gran trabajo y tu amistad y también gracias a Sergio Andrés López, Jorge Bodas Turrado, Luis Bolaños Mures, Alejandro González Sánchez, Adrián Juan Casado, Sergio Mendo Rodríguez y Daniel Villazala Santos, alumnos de la Escuela Taller, porque ya formáis parte de mi universo artístico.

Ahora ya está aquí, en su plaza. Soberbia y orgullosa como todos nosotros, anunciando el carnaval bañezano. Yo me siento como ese padre cuando comprueba que su hijo ya no le necesita, que ha aprendido a volar.

Los actores de Templete saludan al final de la actuación en una imagen de archivo tomada en el Teatro Municipal el pasado mes de mayo.

El Templete Teatro de La Bañeza ganó ayer el primer premio del XV Certamen Nacional de Teatro para Aficionados ‘Ciudad de Benavente’ con la representación de ‘Llama a un inspector’, una comedia que ya fue representada en la puesta de largo de este grupo tras la inauguración del Teatro Municipal bañezano y que cosechó un importante éxito de público.

Según la información a la que ha tenido acceso Ibañeza.es, ‘Llama a un inspector’ le dio también a Templete Teatro el premio al mejor actor principal para Jesús Rubio, a la mejor dirección para Javier G. Beamont, al mejor vestuario para Paty Gasull, y el galardón al mejor montaje. Así, de las ocho nominaciones conseguidas, el grupo local ha logrado traer para La Bañeza cuatro premios, además del título de ganador del certamen.

La gala de clausura del XV Certamen de Teatro para Aficionados Ciudad de Benavente tuvo lugar anoche con un acto para finalizar este encuentro que se ha convertido en un referente nacional para el resto de las celebraciones de esta naturaleza, algo parecido a lo que ocurre con el que programa la localidad vecina de Jiménez de Jamuz, que esta tarde también levantará el telón de su ‘Tierra de Comediantes’.

Agentes del puesto principal de la Guardia Civil de La Bañeza detuvieron este viernes por la tarde a J.L.D.A., de 64 años y residente en el barrio del Polvorín, por la posesión de una colección de armas antiguas sin legalizar además de la tenencia de 127 gramos de cannabis sativa en su domicilio particular, que fue registrado por la Benemérita, según publica hoy el rotativo provincial La Crónica de León, tras haber consultado fuentes vecinales.

Al parecer, durante el registro del domicilio familiar del detenido, los agentes del orden encontraron una colección de armas históricas cuyo volumen y características no fueron precisadas, además de la cantidad de la sustancia psicoactiva anteriormente mencionada. Según la información a la que tuvo acceso La Crónica, entre las armas podría encontrarse un fusil del siglo XIX, si bien los efectos intervenidos y el detenido fueron puestos a disposición del Juzgado de Guardia de La Bañeza, tras haber prestado declaración.

Cuando esta columna se descuelgue en Internet se habrá inaugurado ya el precioso monumento al carnaval en la plaza que lleva el nombre de esta fiesta por excelencia de los bañezanos. Sí, con toda seguridad. No he tenido oportunidad de verlo colocado en el pedestal, aunque conozco los bocetos y la miniatura que Antonio Odón Alonso hizo para llevar a cabo el monumento. Cuando llegué de viaje esta semana ya lo habían cubierto con una lona y yo ya no estoy para andar saltando huertos ajenos ni pedestales carnavalescos, por mucha curiosidad que he sentido en ver el resultado final.

Con esta premisa por delante viene a mi memoria una inauguración que hace ahora 120 años se llevó a cabo en la Plaza Mayor de la Bañeza. Fue, como digo, en 1891, cuando la Corporación municipal inauguraba la farola de la plaza, que hoy está instalada en la plaza de San Salvador. Cuentan las crónicas que aquel hermoso día, con toda la población presente, a cuyo frente estaban alcalde y concejales rodeando el pedestal y sus luminarias, cubiertas también por una lona, al tirar de las cuerdas que sujetaban el tapado pudo verse un enorme cartel con una cuarteta que rezaba:

Esta piedra funeral

representa en La Bañeza

la descomunal cabeza

de un ilustre concejal.

La que se lió fue parda, aunque los servicios técnicos municipales se aprestaron a retirar el cartelón. Pero fueron muchos los bañezanos que pudieron leer los versos y realizar las cábalas correspondientes para identificar el famoso edil de cabezón fenomenal.

Como digo más arriba yo ya no estoy para andar saltando huertos ajenos ni pedestales de estatuas de carnaval. Pero lo que el esqueleto no ejecuta la cabeza si lo ha propuesto, en los cuatro o cinco días que he pasado por la plaza de Carnaval. Vaya que sí. Hubiera sido chocante y hasta carnavalesco. Ese carnaval auténtico que es el que nos ha valido la declaración de Interés Turístico Nacional. Uno, con la jubilación a cuestas pierde pan y pierde perro. Pero me hubiera gustado colocar otro cartelón como aquel que hace 120 años adornó el pedestal de la farola de la plaza.

Y es que, uno que es más que amigo del alma del autor de la estatua del carnal, Toño Odón Alonso, sabe de primera mano los modelos que ha tenido que usar para desarrollar su planeamiento. Porque una cosa es pintar un cartel de carnaval, de donde vienen los primeros bocetos y otra muy distinta es darle cabida a la tercera dimensión. Sé qué concejal tuvo in mente mi buen amigo Toño para concebir el casquete del ayuntamiento y los palos que tuvo que tocar para levantar unas almenas cachondas de la torre de la iglesia de Santa María.

No, coño, no lo voy a decir. Faltaría más. Que Toño Odón, además de artista, come de su puesto como funcionario en el excelentísimo. No. Pero nadie me va a cortar de emular al anónimo bañezano poeta de aquellos finales del siglo XIX para, que con tan sólo cambiar un verso, haber colocado un cartelón con la cuarteta:

La estatua del carnaval

representa en La Bañeza

la descomunal cabeza

de un ilustre concejal.

¿O no? Me cagüenlaaaa. Lástima que uno ya no esté para saltar huertos ajenos y…. Vale ya de tanto lamento. Que quede constancia de mi iniciativa. Pobre iniciativa si se compara con la de aquellos que a través de Internet consiguieron que el Ayuntamiento de La Bañeza diera el nombre del carnaval a una plaza céntrica y el que tuvo la idea de colocar una estatua descomunal como la que ideo Antonio Odón Alonso. Felicidades a unos y a otro y felicitémonos todos los bañezanos porque el carnaval seguirá siendo lo que nosotros queramos. Unos con sus nuevas fantasías e imaginaciones y otros, los que ya cumplimos nuestro ciclo, viendo, añorando y envidiando que todavía queden gentes que pueden saltar huertos ajenos para descojonarse de risa de ellos mismos y de los demás. Eso es CARNAVAL.

P.J. Abajo

Ya es una realidad; la idea que nació en una servilleta de bar a mediados de los noventa de la mano del artista bañezano Toño Odón, y que un grupo de alumnos de carpintería metálica de la Escuela Taller han llevado a cabo durante los últimos meses, ya está oficialmente inaugurada desde este sábado, aunque todavía queda pendiente una gran fiesta para celebrar por todo lo alto que la plaza del Carnaval y su monumento quedarán ahí como homenaje a los aficionados que han logrado mantener esta fiesta de Interés Turístico Nacional y que para los auténticos carnavaleros es algo que tiene una identidad y un adjetivo propio conocido como ‘sentimiento’.

Foto de familia de Toño Odón, alcalde y concejales, y profesores y alumnos de la Escuela Taller El Albergue.

Un boceto que nació para ser cartel anunciador del Carnaval en el año 1996, pin para las solapas de algunas chaquetas, escultura de sobremesa o disfraz en la fiesta más representativa para la ciudad es ya un auténtico icono de algo más de 22 toneladas de peso -concretamente unos 22.400 kilos según la grúa que la trasladó hace unos días a su emplazamiento definitivo- y cinco metros y medio de altura, hecha en acero corten y acero inoxidable para lograr ese efecto visual de blanco y negro de la pieza original que supone esos ‘sentimientos encontrados’ a los que aludía su autor durante la inaguración para explicar el porqué de esta imagen tan presente en la mente de los bañezanos.

En la puesta de largo estuvieron presentes autoridades, alumnos de la Escuela Taller y sus profesores, bañezanos y el propio autor del diseño, Toño Odón, que mostró su agradecimiento a quienes han podido hacer realidad este gran icono con el que quedará constancia para las generaciones venideras la importancia histórica de esta fiesta para La Bañeza. Por su parte, el alcalde, José Miguel Palazuelo, ironizó con el diseño de la escultura que está compuesta por el esbozo de “las dos torres de los edificios más representativos de la plaza Mayor -el consistorio y la iglesia de Santa María- y, precisamente, las dos instituciones más atacadas en la tradición de la fiesta por los carnavaleros”, señaló.

El monumento al Carnaval, que fue descubierto con música de uno de los ‘grandes’ del antruejo -Georgie Dann- es una pieza que pasará a formar parte del paisaje urbano de la ciudad “y de la historia de La Bañeza”, tal y como señaló el alcalde, al tiempo que aseguró que este lugar será “el mejor espacio para que los grupos de disfrazados que participan en los desfiles posen para hacerse la tradicional foto de familia. Y hablando de fotos, tras la inauguración, el ‘padre’ del icono posó delante de la escultura con los concejales, con los chavales de la Escuela Taller que han dado forma a su monumento y con numerosos amigos que quisieron inmortalizar con el artista este día tan importante para el Carnaval de La Bañeza.

Si hay un plato que lleva el nombre de La Bañeza a las mesas de medio mundo, ese es el de las alubias con un sello de garantía que indica que fueron cultivadas en esta tierra; una legumbre que ha dado fama a la ciudad no sólo por la Alubiada en la que se preparan y se sirven 6.000 raciones en plena plaza Mayor o el Capítulo que organiza la cofradía gastronómica creada en torno a este producto del campo, sino por ser un alimento con gran riqueza y que se puede cocinar de diferentes maneras, pero que siempre da forma a un buen menú.

Después de haber enseñado a toda la región a través de las cámaras de Castilla y León Televisión cómo son y cómo se preparan las alubias al estilo tradicional bañezano, el restaurante Mirador del Ermitage ha puesto en marcha las jornadas de Exaltación de la Alubia de La Bañeza, una iniciativa que pretende potenciar el consumo de este manjar del campo leonés desde el comedor de este establecimiento hostelero local que, incluso, ha sido reconocido y distinguido por su defensa y promoción de la legumbre.

Para exaltar la riqueza de este producto agroalimentario con identidad propia, el Mirador del Ermitage ha preparado un menú en el que las Alubias de La Bañeza son el plato ‘estrella’ y donde no falta un entrante de Cecina de León aliñada con aceite de oliva y pimienta negra, otro de Queso de cabra tostado sobre salsa agridulce y un tercer entrante de Delicias calientes, que otra de las especialidades de esta casa que cuenta con décadas de experiencia y que tiene como un punto importante en su filosofía el hecho de que “lo que hace que un restaurante sea único son los pequeños detalles, aunque a veces sean grandes detalles…”

Después de los generosos entrantes llega el plato por excelencia del menú, que son las Alubias de La Bañeza servidas en una cazuela de barro de Jiménez como manda la tradición de esta tierra; se trata de un homenaje a la ciudad, aunque el postre no es menos bañezano ya que está concebido en un plato a base de Yemas elaboradas artesanalmente por la propia confitería del Mirador del Ermitage, un agradable dulce final que hará a los comensales disfrutar de este menú en el que se incluye café y un buen vino tinto de la Bodega Mirador del Ermitage.

La Exaltación de la Alubia de La Bañeza comenzó hace unos días y se prolongará durante todo el mes de noviembre para que los visitantes puedan conocer nuestra legumbre más famosa, al tiempo que los bañezanos de toda la vida -los que ya la conocen- puedan disfutarla en un lujoso comedor junto a otras viandas que serán preparadas con mucha dedicación en las cocinas de este restaurante que ha logrado elevar a las alubias bañezanas a la categoría de los manjares más exquisitos. Para más información y reservas, el teléfono 987 641 812 y el correo electrónico miradordelermitage@miradordelermitage.com.

Foto de familia de los participantes.

Después de doce meses de trabajo, este viernes se clausuró la Escuela Taller El Albergue con un acto de clausura en el que estuvo presente el gerente del Servicio territorial de Empleo de Castilla y León, Francisco Javier Otazu, el alcalde, José Miguel Palazuelo, los profesores y alumnos participantes para dar por finalizada este periodo de formación que ha supuesto una inversión de unos 340.000 euros e incluido a 24 jóvenes -8 en cada uno de los tres grupos- menores de 25 años en las modalidades de carpintería metálica, de madera y albañilería.

El acto se desarrolló en el edificio conocido como Casa Camineros, lugar que albergará en el futuro la Escuela de Hostelería. Se trata de una construcción de más de 420 metros cuadrados, ampliados gracias al proyecto que acaba de concluir con el inicio trabajos de adecuación en el interior para el centro de formación futuro. En la actualidad, el Ayuntamiento trabaja para conseguir una segunda fase que permita a la Escuela Taller finalizar este proyecto de rehabilitación arquitectónica.

El alcalde, José Miguel Palazuelo, agradeció a los alumnos y profesores el trabajo realizado, así como a la Junta de Castilla y León por hacer posible esta Escuela Taller para que los jóvenes puedan estar ocupados mientras se preparan para encontrar un trabajo que les permita poner en práctica todo lo que han aprendido, aunque lamentó que no tengan una duración superior al año. Por su parte, el representante de la institución regional, Francisco Javier Otazu, tuvo palabras de felicitación para los jóvenes y procedió a realizar la entrega de diplomas que acreditan haber alcanzado con éxito el final del proyecto formativo.

Un momento de la presentación.

La Coral del Milenario ha conseguido hacer realidad el “sueño que tenía desde hace muchos años” como recordó su presidente, Alberto Atance, consistente en grabar un disco con algunos de sus mejores trabajos musicales, un compacto que tuvo su puesta de largo ayer por la noche en un acto organizado por la agrupación musical con el fin de dar a conocer la producción y el programa Otoño Coral que ya alcanza su duodécima edición.

Diecisiete canciones, entre las que se incluyen boleros, temas religiosos, canciones populares y varias letras que hablan de La Bañeza y de León forman parte de un trabajo ‘pendiente’ para la Coral, algo que “salía en numerosas reuniones de la directiva desde hace tiempo” tal y como recordaron algunos de sus miembros, y que gracias a la generosidad de Conrado Blanco han podido sacar a la luz y que estará a la venta en varios puntos de la ciudad -entre ellos la Oficina municipal de Turismo- al precio de 10 euros.

El alcalde, José Miguel Palazuelo, aseguró que “nunca es tarde si la dicha es buena” y consideró que “ha merecido la pena esperar para tener en nuestras manos este disco” en el que se incluye el Himno a La Bañeza, una obra cantada a cuatro voces por la Coral que será “utilizado en los actos oficiales de ahora en adelante”, según avanzó el regidor. Por su parte, el mecenas de la producción, Conrado Blanco, felicitó a la Coral “por todo lo que hace en pro de la ciudad” al mismo tiempo que aseguró que los coralistas “cantan como los ángeles o, mejor dicho, los ángeles cantan como la Coral”.

Como ya había adelantado este periódico el pasado mes de julio, el disco fue grabado íntegramente en el Teatro Municipal por ser uno de los mejores lugares para recoger los sonidos, una tarea que se prolongó durante dos fines de semana, según indicó ayer Atance, que recordó que los temas elegidos fueron consensuados entre todos los miembros de la Coral y, finalmente, seleccionados por su directora, Mayte Esteban. Además, Atance consideró que ha sido un trabajo “difícil, especialmente en varios aspectos como el diseño de la carpeta o algunas otras cuestiones técnicas que impidieron presentar el compacto en agosto”, tal y como estaba previsto, aprovechando las fiestas patronales; sin embargo, “lo importante es que se ha hecho y que quienes lo escuchen lo disfruten”, concluyó el presidente.

XII Otoño Coral

Por otra parte, además de la presentación del CD, en el acto también se hizo un repaso por los conciertos que integrarán el programa Otoño Coral que alcanza su duodécima edición. Atance recordó que este año se llevará el ciclo al Teatro Municipal durante cuatro fines de semana del mes de noviembre y que servirá para “calentar nuestro espíritu y nuestro corazón para aliviar la bajada de temperaturas”, según se recoge en la revista conmemorativa, una publicación que también fue presentada y distribuida en el acto de ayer.

En concreto, este ciclo cuenta con las actuaciones de la Coral del Milenario para cerrar el programa, el día 27 de noviembre, el Orfeón Valdeorrés del Barco de Valdeorras (Orense), la coral En femenino plural, de Bembibre, y la agrupación mallorquina de Sa Pobla, que será la encargada de abrir el XII Otoño Coral el próximo 5 de noviembre a las 21 horas y con un precio único de entradas a 3 euros para cada uno de los cuatro conciertos, independientemente de la ubicación de las butacas.

Los coralistas descansan un momento durante la grabación y posan para Ibañeza.es en las butacas del teatro.